Todo ello en una época marcada por la violencia del narcotráfico y la guerra sucia entre el Estado y los grupos guerrilleros, una época en la que la selección de fútbol logró cambiar la imagen del país y dar esperanza a los millones de personas que sufrían las consecuencias de la guerra de cárteles, la corrupción política y las drogas.
El equipo nacional colombiano, con Andrés Escobar como líder indiscutible y una generación de grandes jugadores como Valderrama, Freddy Rincón, René Higuita o el “Tren” Valencia, había logrado clasificarse para la Copa del Mundo de 1994 por primera vez en 28 años, con una derrota en 22 partidos y humillando en su propia casa a la selección argentina, convirtiéndose en una de las favoritas del mundial que se celebraría en Estados Unidos. Sin embargo, la desgracia llegaría en una desafortunada primera fase del mundial, cuando un gol en propia puerta del propio Andrés Escobar, terminaría por eliminar a la selección cafetera. La eliminatoria acabaría por costar la vida al jugador, asesinado a tiros por sicarios en un restaurante de la ciudad de Medellín, contratados por narcotraficantes del clan de los Pepes (quienes habían colaborado con las fuerzas policiales para asesinar a Pablo Escobar), quienes habían perdido millones de dólares en apuestas a favor de la selección de su país.
Con decenas de entrevistas e imágenes que ilustran la época y los orígenes y vida de sus dos personajes principales, este documental es una pieza imperdible para los amantes de la historia y el fútbol, de los estrechos y extraños vínculos del deporte con los diferentes ámbitos de las sociedades humanas, una fascinante revisión de las intersecciones del deporte, el crimen y la política.