Anto, ¿cómo estás? Quedate tranquila, nadie me robó el celular. Soy Lio. Mirá, como últimamente me la paso casi todo el partido caminando, pensé que puedo aprovechar para contarte como la estoy pasando dentro de la cancha. De paso, manteneme al tanto con lo de la fiebre de Ciro, que me quedé un poco preocupado. Que sí, lo convencí a Honesto para que me deje salir a la cancha con el celular. ¿Cómo que quién es Honesto? Ernesto, el DT. Lucho le puso el apodo, ya sabés como le gusta al yorugua apodar a la gente. Yo creo que le queda bien, gran tipo Valverde, medio secote, pero gran tipo.
Aguardame un cachito que ya salimos. Qué lindo el estadio, che, qué buenos recuerdos me trae. Acá marqué mi primer gol en una final de Champions. ¿Te acordás? De cabeza y hasta perdí un botín! Qué grande Pelopo con esa rosquita, no la podía fallar. Parece que fue ayer pero ya pasaron 9 años…
Listo. Ya está sonando el himno de la Champions, ¡que lindo! Igual ya lo escuché más de 100 veces y aún no me lo aprendí. Después me dicen en Argentina que por qué no canto el himno. Pero mirá, lo escuché más veces a este y todavía solo me sé el final: The Champioooooons.
¡Pero la concha de la lora, Anto! Si aún no toqué la pelota y ya nos hicieron un gol. El chico bosnio de nuevo, sí, el tipo grandote. Me recuerda a Martín Palermo. Parece de madera pero a la que puede te vacuna. Se los comió a Jordi y al negro juntos. Decí que el referí no cobró penal en la jugada anterior. Entre nos… creo que exageró un poco. Está bien, la gente salió un poco fría, pero ya nos vamos a desperezar de a poquito. A ver, justo me acaban de patear. Últimamente estoy con suerte en los tiros libres. Y un portero brasuca siempre me motiva. Lástima, se me fue arriba.
Ché, como corren estos tanos. Hay un ruso que parece Fangio. Espero que en el segundo tiempo se canse un poco, como en la ida. Es que míralo a Don Andrés, cuando se ponen los partidos así de ponerle huevos, se le ve un poco la hilacha. Él dice que no, pero para mí que le dio ya el viejazo, como dice el loco Gatti. Y Busi, ¿sabés que está jugando infiltrado? Sí, como el Diego en el 90. Pero no está nada bien Busi. Menos mal que tenemos a Raki que nos está aguantando a todos. Ché, te dejo un rato. Voy a bajar a buscar la pelota yo. Sí, ya sé que nunca sale bien cuando lo hago, pero viste, son esas cosas que me quedaron del Tata.
No. Tampoco funciona. Me fue peor todavía. Un pibe checo nos perdonó la vida. La toca bien el pibe, medio trotón, pero le pudieron los nervios. Mirá, otra vez el pibe… ¡Que bueno que viniste Gery! Anto, estoy teniendo un deja-vu, me estoy sintiendo como el año pasado en Turin o en Paris… parece que mucho no aprendimos de aquella. Miralo otra vez, al Palermo bosnio. Estoy escribiendo demasiado, ¿verdad? Está bien, voy a ayudar un poco a los chicos en defensa, que lo estamos pasando re-mal. Y de frutilla del postre no sabes ¡la patada que me dio el brasuca! Las bestias que tienen atrás. Pero bestias mal. Decí que me pateó el negro, si me agarra Federico me saca de la cancha. Nos vamos ya al vestuario. Después te cuento que nos dijo Honesto.
Y bueno, Honesto nos dijo que sigamos como hasta ahora. No entendí lo que quiso decir. Y sí, seguimos igual. O peor. El chico bosnio más que Palermo me está empezando a parecer Batistuta. Se lo comió a Gery con ensalada de papas. Que penal claro… al menos el referí le perdonó la roja. A ver, yo le tengo confianza al rubio. Nos salvó las papas muchas veces esta temporada. ¿Sabés que lo intente convencer de nacionalizarse argento? Nos vendría bien para el Mundial. Casi. Nos hicieron el segundo, amor. Se está complicando. Voy a echar una mano en el centro de la cancha.
Sigo con vos, porque apenas toco la pelota. ¡Es que tengo a tres tanos a mi lado siempre! Sí, me cobraron amarilla pero es que lo tuve que patear al ruso! No para de correr, ¡corre más que en el primer tiempo! Estoy tratando de decirle a Honesto que meta algún cambio pero lo veo sentado, cabizbajo. Todo mal, ahora casi nos hacen el tercero y le sacaron amarilla a Lucho también. No anda nada bien Lucho. Mirá que le dije a Honesto “dejálo salir con el mate, que le va a venir bien”. Esto pasa por no hacerme caso. Uf, ahora sí que lo vi mal: nos están matando por arriba, suerte que tenemos al rubio alemán en el arco. No sabés lo que se atajó. Que genio.
Increíble Anto. Nos hicieron otro. El chico portugués este que tenemos de dos no para ni un taxi. Me recuerda a un holandés que jugaba en el Barça cuando yo llegué de chiquito acá. Vos no te acordarás pero buscá “Bogarde” en Youtube y decime si no se le pareció hoy. No te voy a engañar Anto, pero pinta muy mal esto. Confiaba en los chicos, pero voy a tener que hacerlo yo, como toda la temporada. Ahora Honesto ha metido al pibito delgado que llegó este año. Yo no lo quiero bardear pero para mí le queda muy grande la camiseta de Barcelona… Mirá, si antes hablo… La tuvo el chico y se le fue arriba. Nos quedan cuatro minutos. Hemos hecho más en los últimos 5 minutos que en los 80 anteriores. Cuando llegué acá me hablaron mucho de Kaiserlautern, un partido con 3 a 0, eliminados, hasta que apareció un pibe vasco con melena. Tal vez aparezca Sergi, como el año pasado…
Amor, este año vamos a tener unos días más de vacaciones. Y no, Sergi no apareció esta vez. No se puedo creer, Anto. Otro año eliminados en cuartos. ¿Pero sabés que es lo peor? Que fueron mejores. Allá y acá. Lo charlé un poco al final con uno de los tanos y adiviná que me dijo: que cómo no habían podido ficharme a mí se trajeron a lo más parecido que había en España: que también empieza por M y termina por i. ¿Vos sabés de quién habla?
Ah, ¿te acordás de Pep? Me dicen acá que no le fue mucho mejor hoy. Cuando se marchó, recuerdo que le decían que no iba a ganar una Champions sin mí. ¿Vos crees que volveré a ganar una Champions sin él?