¿Dónde estará el pobre Augusto? preguntaba angustiado el presidente de Chile, Salvador Allende en las primeras horas del 11 de septiembre de 1973 al enterarse del golpe de estado que el Ejército estaba ejecutando.Meses antes, en agosto de 1973 Salvador Allende había nombrado comandante en jefe de las fuerzas armadas a un Augusto Pinochet al que se le tenía como un hombre no muy brillante pero sí fiel y al que no se le conocían veleidades políticas.
Pero volviendo a aquel 11 de septiembre, también Pinochet se acordaba de Allende en esas horas de plomo y traiciones. En una de las grabaciones que se conservan de esas horas terribles, al ser preguntado por un subordinado sobre qué debían hacer si capturaban vivo al presidente, Pinochet contestó que lo metieran en un avión que supuestamente lo pondría a salvo, "pero del avión se cae, viejito, cuando vaya volando. Muerto el perro se acabó la rabia".
El resto es historia. Con los Hawker Hunter de la Fuerza Aérea bombardeando la Casa de la Moneda donde se refugiaba, Allende murió, no se sabe si ejecutado o pegándose un tiro en la cabeza con un AK-47 que le regaló Fidel Castro. Y en Chile comenzaban 17 años de siniestra y criminal dictadura. Otra vez el destino ensayando una de sus muecas más crueles.
Pero volviendo a aquel 11 de septiembre, también Pinochet se acordaba de Allende en esas horas de plomo y traiciones. En una de las grabaciones que se conservan de esas horas terribles, al ser preguntado por un subordinado sobre qué debían hacer si capturaban vivo al presidente, Pinochet contestó que lo metieran en un avión que supuestamente lo pondría a salvo, "pero del avión se cae, viejito, cuando vaya volando. Muerto el perro se acabó la rabia".
El resto es historia. Con los Hawker Hunter de la Fuerza Aérea bombardeando la Casa de la Moneda donde se refugiaba, Allende murió, no se sabe si ejecutado o pegándose un tiro en la cabeza con un AK-47 que le regaló Fidel Castro. Y en Chile comenzaban 17 años de siniestra y criminal dictadura. Otra vez el destino ensayando una de sus muecas más crueles.