En esta nueva entrada de nuestra serie dedicada a conocer mejor los entresijos del vital sector alimentario les ofrecemos el documental Nuestro pan de cada día (Unser Tägliches Brot) realizado en 2005 por el austriaco Nikolaus Geyrhalter.
El más preclaro documental que hemos visto sobre la producción a gran escala de alimentos europea sin embargo transcurre sin entrevistas ni narraciones, únicamente con las imágenes y el sonido propios de los operarios y las máquinas de alta tecnología que almacenan, alimentan, cosechan, transportan, sacrifican y descuartizan.
El más preclaro documental que hemos visto sobre la producción a gran escala de alimentos europea sin embargo transcurre sin entrevistas ni narraciones, únicamente con las imágenes y el sonido propios de los operarios y las máquinas de alta tecnología que almacenan, alimentan, cosechan, transportan, sacrifican y descuartizan.
Con una mirada tan fría como inquietante, muestra la producción industrial de lo que comemos cada día. Mediante procesos logísticos de alta eficacia se minimizan gastos y se maximizan beneficios a costa de unos animales convertidos en simples e indefensas unidades de producción que nacen, engordan, producen y son sacrificados prácticamente sin ver el cielo o el horizonte. Con escenas que parecen sacadas de un mal sueño, logra el propósito de que nos revolvamos incómodos en nuestra silla, de hacernos pensar, de molestar nuestra conciencia sobre nuestros hábitos alimentarios.