"Llevo casi tres años recorriendo las zonas más peligrosas del planeta. He invertido todos mis ahorros, he pedido un crédito… ¿Qué más tengo que hacer para poder trabajar? Cada vez que me lo planteo se esboza una sonrisa en mi rostro y niego con la cabeza. Si sigo es porque amo esta profesión con todas mis fuerzas; porque me encanta que mis crónicas acerquen la realidad de un mundo que también existe a otras personas. Pero… nada más. No tengo recompensa más que la mía propia.
¿Hasta cuándo? Es una pregunta que desconozco, pero no creo que pueda aguantar mucho más. Tengo 28 años, vivo con mis padres, no tengo absolutamente nada… ¿Hasta cuándo? No lo sé pero no creo que aguante mucho más. Porque me he dado cuenta que los méritos propios no sirven de nada, que los currículos no los lee nadie. Es una triste realidad que empaña una de las profesiones más bonitas del mundo."
"Periodista español que desde hace enero de 2008 se dedica a recorrer un mundo en guerra... Desde esta tribuna quiero enseñaros ese 'otro' mundo que también existe y donde la línea que separa la vida y la muerte se rige a golpe de kalashnikov... Dónde millones de personas no tienen voz. Este blog quiere convertirse en su voz y en vuestros ojos para desvelar verdades que permanecen aletargadas... Acompáñeme a ese Mundo en Guerra que apenas tiene cabida en los medios de Comunicación; porque sino lo contamos no existe... y sino no existe ganan los Señores de las Sombras. Desde aquí queremos dar cabida a todos esos conflictos olvidados y rescatar del olvido a todos los que sufren en él dándoles voz para que sean ellos, y sólo ellos, los cuenten su historia."
Así se autodefine en su blog 'Un mundo en guerra' Antonio Pampliega (Madrid, 1982), el protagonista del corto documental 'Pagando para ir a la guerra' que hoy publicamos y, lamentablemente, uno de los tres periodistas españoles (junto a Ángel Sastre y José Manuel López) desaparecidos en la ciudad siria de Alepo a principios de julio de este año. El documental, dirigido por Daniel Suberviola, muestra imágenes de la guerra en Alepo en octubre de 2012. Siria es, sin lugar a dudas, el país más peligroso del mundo para ejercer el periodismo; como así lo recoge Reporteros Sin Fronteras en sus diferentes informes. Un total de 40 periodistas han sido asesinados desde que comenzara la revolución en marzo del 2011 y otros 80 han sido secuestrados -de los cuales 20 aún permanecen desaparecidos-. El objetivo, desde los primeros compases del levantamiento popular, ha sido silenciar a la prensa para que no informase de lo que sucede en el país árabe. Como él mismo dice:
"He trabajado cubriendo la guerra de Siria los últimos tres años. He entrado en diez ocasiones y he permanecido en diferentes partes del país más de año y medio. ¿Qué ha cambiado en todo este tiempo? La respuesta es sencilla:poco o nada. La caza del periodista se ha convertido en un deporte entre los grupos afines a Al Qaeda, el Estado Islámico o los leales al régimen. Siria ha puesto de manifiesto, una vez más, que los informadores ya no somos necesarios. Con la llegada de Internet y de las redes sociales y con la creación de nuevos canales, la voz de los periodistas occidentales ha quedado desautorizada y ya no es necesaria, por lo tanto nos convertimos en prescindibles y en elementos molestos y a eliminar."
Porque en 'Pagando para ir a la guerra' (Daniel Suberviola, 2012), Pampliega también denuncia la crisis del periodismo de guerra y la impresentable actitud de algunos grandes medios de comunicación de nuestro país, especialmente hacia los profesionales free-lance, que son quienes realmente se la juegan, sin cobertura de ningún media, en las zonas de guerra.
Porque en 'Pagando para ir a la guerra' (Daniel Suberviola, 2012), Pampliega también denuncia la crisis del periodismo de guerra y la impresentable actitud de algunos grandes medios de comunicación de nuestro país, especialmente hacia los profesionales free-lance, que son quienes realmente se la juegan, sin cobertura de ningún media, en las zonas de guerra.
Tras llevar trabajando cuatro años en zonas de conflicto como Afganistán, el Haití post-terremoto, Irak, Líbano (y, más recientemente, en Siria...) expresa sin embargo su frustración porque a pesar de su trabajo en los medios nacionales "nadie se ha dignado a darme una oportunidad para demostrar si valgo o no valgo".
La financiación de todos estos viajes la tuvo que hacer por su cuenta y en ninguno de los casos pudo siquiera recuperar la inversión vendiendo su trabajo a los media españoles. Esto fue lo que le hizo empezar a vender su trabajo, como tantos otros españoles, a medios internacionales. Y en esas estaba cuando su destino y el de sus dos compañeros se torció en Alepo.
El Juez Roy Bean ruega porque las cosas se estén haciendo bien a nivel diplomático y los tres puedan regresar sanos y prontamente a España. Si quieren comprar su libro colectivo "Siria, más allá de Bab-Al-Salam" cuesta sólo 6 euros y puede ser una ayuda para que este comprometido y valiente reportero pueda reemprender su trabajo de denuncia de la guerra y sus terribles consecuencias una vez eso ocurra. Porque como él mismo reconoce "mientras me quede aire volveré a narrar el horror de la guerra".
Tras este documental les ofrecemos una entrevista de 2012 en la que Pampliega es entrevistado por el mítico periodista Enrique Meneses (a quien tras su muerte homenajeamos en este post) y charlan sobre los sinsabores de su profesión. Fuerza Pampliega y compañeros.
Tras este documental les ofrecemos una entrevista de 2012 en la que Pampliega es entrevistado por el mítico periodista Enrique Meneses (a quien tras su muerte homenajeamos en este post) y charlan sobre los sinsabores de su profesión. Fuerza Pampliega y compañeros.
Entrevista Meneses - Pampliega